La reciente crisis sanitaria que estamos viviendo hace indispensable una batería de medidas sanitarias intensa en cada negocio, pero más en aquellos en que el trato humano entre trabajadores y con público es obligado. Y una de las medidas que más se está adoptando, sobre todo en hostelería y dependencias con tránsito de clientes, son las pantallas de protección contra el coronavirus. Gracias a ellas podremos evitar el trasvase de partículas de saliva que puedan portar el virus y transmitirlo, en especial través de tos o estornudos.

Realmente no hay muchas maneras mejores de evitar que personas distintas entren en contacto directo, lo que ayudará a mantener unas condiciones de seguridad sanitarias que hoy en día son indispensables. Sólo hay que desinfectar las mamparas anti-covid de vez en cuando, con los productos normales de limpieza, para que éstas nos ayuden a combatir la propagación del virus y garanticen la seguridad de nuestra clientela y personal. Y tienen la ventaja añadida de que contribuyen a dar más intimidad a las mesas, de tal manera que lo que hable o haga un usuario no afecta tanto al de al lado.

Los materiales con los que se fabrican estas pantallas protectoras contra el covid-19 son muy fáciles de higienizar. Es fácil desinfectarlos y que la mampara pueda mantenerse en buenas condiciones, cuando además están compuestas de materiales muy resistentes. Además, no desentonan nada y hasta pueden servir para abrigar más tu terraza, por ejemplo, y que no se sienta el viento cuando los clientes y personal transiten entre las mamparas. Son un elemento estético más, antes que un impedimento, pero lo más importante es la seguridad y confianza que aportan a trabajadores y clientela.

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